Todos los años se celebra la Semana Europea de la Movilidad, una campaña orientada a sensibilizar a los ciudadanos sobre las consecuencias negativas que provoca el uso irracional del coche en la ciudad, tanto para cuestiones de salud pública como para el medio ambiente, y los beneficios del uso de modos de transporte más sostenibles como es el transporte público, la bicicleta y los viajes a pie. El portal de motor líder en España coches.net, realizó una encuesta a sus usuarios para conocer más sobre la relación con los distintos medios de transporte, y los resultados fueron concluyentes: el 78% afirmó no poder vivir sin coche.
Sobre la pregunta del medio de transporte favorito para moverse, el coche sigue en lo alto, con un 72,7%, frente al 16,6% que opta por las motocicletas. Moverse a pie es una elección con el 6,7%, por encima de la bici, el patinete o el transporte público.
Restricciones de movilidad en las ciudades
Las ordenanzas y leyes que favorecen la reducción del tráfico en el centro de las grandes ciudades cada vez son más frecuentes, pero aún con un mayor nivel de concientización de los ciudadanos, no hay una interiorización sobre el cambio de comportamiento a la hora de elegir un medio de transporte menos contaminante. A la cuestión de si se restringiera el uso de coches más contaminantes en su ciudad, que opción encontrarían más adecuada, más de la mitad (un 53% de encuestados) señala que son importantes las ayudas para comprar vehículos menos contaminantes. La segunda opción es mejorar el transporte público (32,7%).
La movilidad compartida es una realidad que también llegó para quedarse en las ciudades, pero para el 87,1% de los usuarios todavía no es una opción real. Solamente el 12,9% admite haberlo usado una vez por semana, al menos. Entre los que sí lo usan, el 61% utiliza la modalidad carsharing, seguido por el motosharing (19,5%) y el bicisharing (11,6%).
Marcel Blanes, responsable de relaciones institucionales de coches.net señala que “la preferencia de los usuarios por los vehículos de cuatro ruedas es clara. Y que las motos continúan siendo una alternativa real de movilidad en las ciudades es evidente también (representa la segunda opción de movilidad) y esto debería tenerse en cuenta. Aunque cada vez más, desde las instituciones, se intenta ir por el camino de la sostenibilidad, aún estamos lejos de poder hacer un cambio hacia este tipo de movilidad, entre otros motivos, por la incertidumbre generada con cada normativa sobre este tema. Éstas deberían estar menos enfocadas en prohibir y más en incentivar la compra de vehículos menos contaminantes para así renovar el parque automovilístico. Hasta que no haya un transporte público adaptado al máximo a las necesidades del ciudadano, éste seguirá siendo una opción minoritaria.
