Miles de personas han conmemorado en el sur de Israel el segundo aniversario de los ataques perpetrados por Hamás el 7 de octubre, que resultaron en la muerte de 1,200 personas y el secuestro de 251. Mientras tanto, en Gaza, el día transcurre entre la devastación, el sufrimiento y la creciente escasez de alimentos.
Actualmente, 48 rehenes aún se encuentran en Gaza, y las autoridades israelíes han confirmado que al menos 20 de ellos, todos hombres, están vivos. En este contexto, el Secretario General de la ONU y representantes de importantes agencias han condenado los ataques, haciendo un llamado a recordar a las víctimas y a liberar a los rehenes de inmediato. Ricardo Pires, portavoz de UNICEF, subrayó que este es también un momento para pedir a Israel que cese la matanza indiscriminada de niños en la Franja de Gaza, destacando que, desde el inicio de la crisis, los niños han sido las principales víctimas.
Las cifras son alarmantes: las ofensivas israelíes han causado la muerte de al menos 67,000 palestinos, incluidos 20,000 niños, lo que se traduce en un niño fallecido cada hora durante los últimos dos años. También se reporta que 400 personas han muerto de hambre, entre ellas 101 niños.
En medio de este caos, testimonios de la población reflejan el desolador panorama. Hadil, una mujer embarazada con hijos pequeños, expresó su desesperación: «No tenemos dinero ni recursos para irnos. Pero estamos en la calle». Otro residente, Abed, lamentó la falta de seguridad y recursos: «¿Dónde podemos ir? No hay agua, ni lugar seguro, ni siquiera una tienda”.
En Cisjordania, la extensión del dolor se evidencia con el reporte de 998 palestinos asesinados, 212 de ellos niños, desde el 7 de octubre de 2023. La situación sigue deteriorándose, con un sufrimiento humano indiscriminado en medio del conflicto.
Fuente: ONU últimas noticias