Un reciente estudio realizado por INTIMINA explora la percepción, conocimiento y empleo de los masajeadores íntimos entre mujeres en España, destacando una notable falta de información y visibilidad sobre su uso terapéutico. A pesar de que estos dispositivos han aumentado su popularidad en el ámbito del bienestar sexual, muchas mujeres desconocen su potencial en contextos como la menopausia o como apoyo en tratamientos oncológicos.
Con motivo del Día Mundial del Orgasmo Femenino, la compañía ha presentado su I Estudio sobre el Uso Terapéutico de los Masajeadores Íntimos en España, el cual revela que más del 55% de las encuestadas no están al tanto de los beneficios que ofrecen estos productos para tratar dificultades sexuales como el vaginismo y la dispareunia. Además, una preocupante cifra del 56% desconoce que pueden ayudar a combatir problemas relacionados con la menopausia, como la sequedad o la disminución del deseo sexual.
La actualización en el sector sanitario es necesaria, ya que solo el 20% de las mujeres afirma haber recibido recomendaciones médicas para comenzar a utilizar estos productos. Aun así, un contundente 83% de las encuestadas considera que los profesionales de la salud deberían informar más sobre estas herramientas. La falta de información está ligada a un estigma social, ya que más del 90% de las mujeres siente que existe un tabú en torno a los masajeadores. Solo el 36% se muestra cómoda compartiendo sus experiencias en este ámbito.
A pesar de la desinformación, aquellas que han utilizado masajeadores íntimos reportan cambios positivos en su bienestar. El 75% asegura haber notado mejoras, siendo las más comunes el aumento de la lubricación, el fortalecimiento de la relación de pareja y la reducción del dolor. Esta satisfacción se traduce en recomendaciones, ya que 9 de cada 10 usuarias incentivan a otras a probarlos.
La diversidad de masajeadores utilizados varía, siendo los vibradores y estimuladores de clítoris los más comunes. Más de un 70% de las encuestadas expresó que estaría dispuesta a incorporar estos dispositivos en su rutina de autocuidado al conocer sus beneficios.
Expertos en salud pública, como María Pérez, fisioterapeuta especializada en suelo pélvico, enfatizan que el uso de masajeadores no se reduce a del placer. «En la menopausia o tras un tratamiento oncológico, pueden ser clave para mejorar la vascularización y el bienestar emocional», afirma. Pilar Ruiz, responsable de comunicación de INTIMINA en España, subraya la importancia de visibilizar el uso de estos productos como herramientas de salud, abriendo la puerta a una conciencia más libre de prejuicios.