En 2024, aproximadamente una cuarta parte de la población de la Unión Europea, es decir, el 23,9% de las personas mayores de 16 años, se identificó como persona con discapacidad. Este dato revela una creciente preocupación por la inclusión y el bienestar de este grupo, especialmente al observar que la incidencia de discapacidad aumenta significativamente con la edad; solo el 7,1% de los jóvenes entre 16 y 24 años reportaron alguna limitación, mientras que este porcentaje se eleva alarmantemente al 72,3% en la franja de 85 años en adelante.
Además, el desafío que enfrentan las personas con discapacidad no se limita solamente a las cuestiones de salud y bienestar. Un 28,7% de esta población se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social, lo que pone de manifiesto la necesidad urgente de políticas más efectivas para su integración y apoyo. A pesar de estas dificultades, un dato alentador es que el 30% de los jóvenes con discapacidad, en la franja de 25 a 34 años, logra completar la educación superior, lo que sugiere un potencial significativo si se les brinda el apoyo adecuado.
La recopilación de estos datos, junto con otros indicadores clave, se encuentra disponible en la publicación en línea sobre estadísticas de discapacidad. Este recurso proporciona información detallada sobre las condiciones de educación, financieras, de pobreza y de vivienda que enfrenta esta población. Adicionalmente, se incluyen datos sobre actividades recreativas y el uso de internet, así como un enfoque específico en los ancianos que requieren asistencia, resaltando la importancia de atender sus necesidades particulares.
El 3 de diciembre de cada año se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una jornada que invita a reflexionar sobre la vida de estas personas y la importancia de su inclusión en la sociedad. La publicación de estadísticas de discapacidad en la Unión Europea tiene el objetivo de aumentar la visibilidad sobre estas cuestiones y contribuir a un cambio positivo en la forma en que se aborda la discapacidad.
Los datos actuales subrayan la necesidad imperiosa de un compromiso renovado hacia la equidad y la integración de las personas con discapacidad en todos los aspectos de la vida social y económica.





