Mónica Ortiz Álvarez, de 26 años y oriunda de San Bartolo Coyotepec en Oaxaca, se ha convertido en un referente de ciencia y pasión por el espacio en México, siendo la primera astronauta análoga del estado. Desde pequeña, su abuelo le contaba historias sobre las estrellas, lo que despertó en ella un amor profundo por la astronomía y la astrofísica. Mónica recuerda con cariño cómo sus padres, médicos de profesión, también fomentaron su interés en la ciencia a través de libros y conversaciones sobre fisiología espacial y la adaptación del cuerpo humano en condiciones de microgravedad.
Su camino académico ha sido diverso; comenzó con una licenciatura en Derecho y Ciencias Sociales en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, pero pronto se dio cuenta de que su verdadera pasión residía en las ciencias naturales. Esta búsqueda la llevó a la Universidad de Edimburgo, donde se graduó en Astrobiología. Durante su infancia, la educación se convirtió en su refugio ante el acoso escolar, una experiencia que ha moldeado aún más su deseo de compartir conocimiento.
Mónica no solo ha destacado por su formación académica, sino que ha saltado rápidamente a posiciones de liderazgo. Actualmente, es pionera en leyes espaciales, educadora en el Space Center Houston de la NASA y embajadora de la Estación Espacial Internacional. Su trabajo está inspirado en figuras femeninas influyentes en el sector, como la astronauta Barbara Morgan y la doctora Jeanette Márquez, quienes han marcado el camino para las mujeres en la ciencia.
En 2023, Mónica asumió el cargo de comandanta de PRINCIPIA, la primera misión latinoamericana de investigación análoga de Marte en España. En este proyecto, un grupo selecto de investigadores simula las condiciones del planeta rojo, realizando pruebas científicas y psicológicas que son cruciales para preparar a futuros astronautas. Mónica ha compartido las dificultades del contacto cero con el mundo exterior durante un año, un reto que requirió ajustar sus hábitos y limitar las interacciones sociales.
Su labor ha sido reconocida tanto a nivel nacional como internacional. En 2023, el Senado de la República le otorgó un merecido reconocimiento, además de ser premiada por el Congreso del estado de Oaxaca en la categoría de “Mujer en la Ciencia y la Tecnología”. Recientemente fue incluida en una exposición de la ONU en Ginebra, donde se le reconoció por su impacto en la ciencia y la tecnología.
Mónica también se ha convertido en una voz de empoderamiento para las niñas. En el contexto del Día Internacional de la Niña, celebrado el pasado 11 de octubre, ella afirma que cada niña debe enfocarse en ser la mejor versión de sí misma y encontrar su pasión. «Lleguen tan lejos que las estrellas se vean cercanas», es el mensaje inspirador que Mónica comparte, haciendo un llamado a las nuevas generaciones a perseguir sus sueños y contribuir a un mundo más equitativo y lleno de oportunidades.
Fuente: ONU últimas noticias
