La Demarcación de Ciudad Real del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha fue el escenario de la presentación de «Puedes esconder los cuadros, puedes evitar la música», una obra del arquitecto David García-Manzanares que recoge 15 artículos en los que se reflexiona sobre la intersección entre arquitectura, arte y la vida cotidiana. Este libro, el tercero del autor, compila escritos previamente publicados en revistas especializadas y prensa general, así como artículos inéditos que combinan análisis arquitectónicos con experiencias personales enriquecidas por una sensibilidad artística.
Durante la presentación, que se inscribe en el marco del mes de la Arquitectura promovido por la Demarcación, José Antonio González Baos, presidente de esta Demarcación, subrayó la capacidad del libro para transmitir la verdadera pasión por la arquitectura. «David nos proporciona herramientas para entender la emoción que aporta la arquitectura a la vida diaria. Nos invita a reflexionar sobre nuestro trabajo y sobre cómo habitamos el espacio urbano», declaró.
Elena Guijarro, decana del COACM, también destacó la importancia de acercar la arquitectura a la sociedad, enfatizando su impacto en la calidad de vida de los ciudadanos. «El trabajo de David pone de relieve el valor de una buena arquitectura, que cuida de quienes la habitan», afirmó, haciendo hincapié en la creatividad y compromiso del autor con su disciplina.
Por su parte, el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, valoró la accesibilidad del texto para todo tipo de lectores, indicando que «no es un libro solo para arquitectos; cualquier persona puede disfrutarlo y comprender cómo la arquitectura influye en nuestras vidas cotidianas».
Finalmente, David García-Manzanares expresó su gratitud por el apoyo recibido, recordando que el título de su obra proviene de una frase de la presentación de la película «El vientre de un arquitecto» en el Festival de Cannes de 1987. Esta frase encapsula el lema de su obra: la idea de que la arquitectura es una de las artes más públicas e imperecederas. A través de su escritura, el autor presenta una fusión entre el análisis de obras icónicas y reflexiones sobre espacios cotidianos, mostrando que la arquitectura es un arte que transforma y que está intrínsecamente ligado a la experiencia humana.





