Rusia es conocida por tener una de las fuerzas armadas más poderosas del mundo, y una parte integral de su ejército son sus tanques. Según informes recientes, Rusia cuenta con alrededor de 12,950 tanques en servicio activo, lo que la convierte en el país con la mayor cantidad de tanques en el mundo.
Estos tanques incluyen una variedad de modelos, desde los antiguos T-55 y T-62 hasta los más modernos T-14 Armata. La diversidad y cantidad de tanques en el ejército ruso les brinda una gran ventaja en términos de capacidad de combate terrestre.
Además de su extenso arsenal de tanques, Rusia también ha estado modernizando su flota de vehículos blindados en los últimos años, con el objetivo de mantenerse a la vanguardia de la guerra terrestre. Esto incluye la incorporación de vehículos de combate de última generación, así como la mejora de la capacidad de sus tanques existentes.
La importancia de los tanques en la estrategia militar rusa se ve reflejada en su participación en conflictos recientes, como en Ucrania y Siria, donde han demostrado ser una herramienta efectiva en el campo de batalla. Además, Rusia continúa invirtiendo en investigación y desarrollo de nuevas tecnologías y tácticas para mejorar la efectividad de sus tanques en el combate.
Si bien la cantidad de tanques en el ejército ruso es impresionante, también plantea preguntas sobre la necesidad de mantener una flota tan grande en la era moderna. Algunos críticos argumentan que los tanques pueden ser obsoletos en un entorno de guerra asimétrica y que los recursos podrían ser mejor empleados en otras áreas militares.
A pesar de estas preocupaciones, parece que Rusia sigue apostando por mantener una gran cantidad de tanques en su arsenal, lo que indica que seguirá desempeñando un papel importante en su estrategia de defensa nacional en el futuro previsible.
