El estreno de una nueva película de Woody Allen siempre es una buena noticia. Aunque no demuestre en cada obra su máximo nivel creativo, sus trabajos suelen ser una apuesta segura a la hora de comprar una entrada porque, como mínimo, no va a ser una pérdida de tiempo.
You will meet a tall dark stranger (Conocerás al hombre de tus sueños) es de lo mejorcito que ofrece la cartelera, pero encuadrada en la amplísima filmografía del prolífico director sin duda no ocupa ningún puesto preferente.
Estamos ante una de estas películas que Woody Allen se saca de la chistera sin esfuerzo. Se sirve de un reparto de lujo, un guión aceptable, la banda sonora exquisita de turno y de su temática más habitual entorno a la relaciones humanas con el amor como ingrediente principal.
El leitmotiv de Conocerás al hombre de tus sueños es el hecho de avanzar en la vida, con unos protagonistas como siempre atrapados en sus miserias que gracias a remalazos de ambición alimentados por el anhelo de un nuevo amor, encuentran un motivo para dar un paso adelante y avanzar valerosamente por la vida.
Este genuino producto Allen, lamentablemente, está completamente falto de alma. En Conocerás al hombre de tus sueños vemos al Woody Allen más disperso, más básico, menos brillante e, incluso, torpe (y ahí están algunos fallos de racord para demostrarlo).
Lo que nunca pierde es la frescor en los diálogos y el excelente rendimiento que siempre ofrecen los actores que trabajan con él, algo que en Conocerás al hombre de tus sueños se subraya porque precisamente los actores compensan una grave falta de ritmo en varios tramos de la película.
Me atrevo a decir que Woody Allen se ha equivocado con la historia que cuenta porque está llena de vanalidades e historias conocidas, pone el piloto automático y se olvida de arriesgarse en hacer una película más atrevida y más interesante. Sin ir más lejos, la trama de Anthony Hopkins es sencillamente prescindible y la de Josh Brolin vale para hacer una película entera que, por culpa de tanta paja, lamentablemente se queda a medias.
Conocerás al hombre de tus sueños, en definitiva, es una película de ir tirando: correcta, excelente a veces; pero sin inquietud, sin ganas y sin profundidad. Absolutamente neutra.
Por esto, por la película que ha hecho, me parece adecuado terminar mi reseña con unas palabras directas para Woody Allen para cuando…ejem…lo lea:
Woody, eres un grande. Indiscutiblemente lo eres, pero Concerás al hombre de tus sueños me ha hecho pensar en aquellas declaraciones en las que te calificaste a ti mismo de «mediocre». No se trata de MEDIOCRIDAD Woody, lo que es es FALTA DE HAMBRE y tu última película es una demostración de ello. Quizás tu ímpetu creativo te obliga a escribir constantemente y a rodar una película cada año por la inquietud de contar historias, pero hay que saber parar. No sacas una obra maestra de cada película porque no quieres pararte a digerir lo que has escrito y sueltas lo que tienes porque te lo puedes permitir y sabes que un aplauso, aunque no sea unánime, no te lo quitará nadie.
Trabajar constantemente no te hará ser más joven, aprovecha tu talento al máximo, no tengas prisa y madura tus películas. Ten el hambre de hacer una MEJOR película, no la de hacer OTRA película. Todos te lo agradeceremos.