Estamos ante el primer libro de Khaled Hosseini, médico musulmán que huyó a Estados Unidos tras la entrada de los talibanes y acaba de publicar su segunda novela «Mil soles espléndidos». De alguna forma podemos pensar en un relato autobiográfico.
Está ambientado en Afganistán (1975) durante la invasión rusa previa a los talibanes. La novela narra la vida de dos niños afganos -Amir y Hassan- y construye una impresionante historia de encuentro-desencuentro, amistad-tración, en la que destaca un hilo conductor que enhebra el libro: el arrepentimiento del protagonista con su culmen en un último capítulo conmovedor: una cometa es la causa de su culpa y la llave de su salvación.
«Cometas en el cielo» va creciendo en intensidad, aunque engancha desde la primera página, no hay nada superfluo. Mantiene en todo momento un ritmo sostenido que nos va conmoviendo.
Recoge momentos duros y sangrientos, pero se trata de una violencia medida, con la contrapartida de una dosis justa de ternura. En algunas ocasiones se puede respirar una violencia más sutil pero más dura: la mezquindad humana en un forcejeo con los sentimientos. A la vez hay páginas impregnadas de nobleza y humanidad y destaca la mirada de Hosseini sobre la mujer: una visión que la enaltece.
Sorprende la prosa suelta de Khaled Hosseini, al tratarse de su primera obra y la facilidad para crear ambientes. El autor utiliza a veces el relato directo con descripciones costumbristas, llenas de colorido, recurre también a la tercera persona, distanciandose un poco de la narración, y con frecuencia se vale del monólogo interior en los momentos en que quiere reflejar los sentimientos más intimos del protagonista. Recojo el párrafo con el que arranca el primer capítulo: «Me convertí en lo que hoy soy a los doce años. Era un frío y encapotado día de invierno de 1975. recuerdo el momento exacto: estaba agazapado detrás de una pared de adobe desmoronada, observando a hurtadillas el callejón próximo al riachuelo helado. De eso hace muchos años, pero con el tiempo he descubierto que lo que dicen del pasado, que es posible enterrarlo, no es cierto. Porque el pasado se abre paso a zarpazos.»
Un libro que nos ayuda a comprender mejor los sufrimientos y los sentimientos del pueblo afgano.
Editorial Salamandra, 2003
382 pags
