Durante su primera intervención ante el Consejo de Seguridad como representante especial del Secretario General para Colombia, Miroslav Jenča reafirmó el firme compromiso de la Organización con el proceso de paz en el país y su disposición a asumir sus funciones en Bogotá a finales de octubre. Jenča agradeció al Gobierno colombiano por su colaboración sostenida con la Misión de Verificación y destacó la importancia del Consejo en los logros alcanzados hasta ahora, enfatizando que la implementación integral del Acuerdo Final de Paz, firmado en 2016, sigue siendo el pilar central para consolidar una paz duradera en Colombia.
En una visita preparatoria a Colombia en septiembre, el representante mantuvo reuniones con una variedad de actores, incluidos miembros del Gobierno, excombatientes del partido Comunes, representantes de comunidades indígenas y afrocolombianas, así como líderes de la sociedad civil. Resaltó avances en áreas clave como la reforma rural, la reintegración y la justicia transicional, aunque advirtió sobre los desafíos persistentes, especialmente en materia de seguridad y financiación.
Jenča celebró la emisión de las primeras sentencias restaurativas por parte de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), considerándolas un hito histórico en la búsqueda de verdad, justicia y reparación. Subrayó que estas acciones involucran medidas que deben llevar a cabo los responsables de delitos graves, como la búsqueda de personas desaparecidas, la remoción de minas y la construcción de infraestructura comunitaria. Además, hizo un llamado al Estado para facilitar las condiciones necesarias para la implementación efectiva de estas iniciativas, enfatizando que la inseguridad representa el mayor riesgo para la sostenibilidad del proceso de paz.
El representante especial también destacó la confianza que genera la Misión de Verificación en las zonas más afectadas por el conflicto, al reafirmar su disposición para adaptarse a las necesidades cambiantes del proceso. Jenča consideró el caso colombiano como un “caso excepcional” en el contexto de la asistencia del Consejo de Seguridad a un proceso de paz que impulsa el propio país.
Por su parte, la embajadora Leonor Zalabata, representante permanente de Colombia ante las Naciones Unidas, ratificó el compromiso del Gobierno con la implementación del Acuerdo de Paz de 2016, presentando avances concretos en áreas como la formalización de tierras, la titulación de resguardos indígenas y el apoyo a excombatientes en proceso de reincorporación. No obstante, también advirtió sobre los desafíos persistentes, entre ellos la violencia contra líderes sociales y las brechas sociales. Señaló que la paz en Colombia no es solo un propósito nacional, sino un bien público global.
En contraste, el representante de Estados Unidos cuestionó las políticas del presidente Gustavo Petro en materia de seguridad y paz, sugiriendo que el mandato de la Misión de Verificación se ha ampliado en exceso y señalando que Washington está revisando la validez del apoyo de la ONU a dicha misión.
Fuente: ONU últimas noticias