En un contexto de violencia creciente, los aproximadamente 30.000 residentes del campo de refugiados de Yenín, situado en Cisjordania ocupada, han abandonado sus hogares debido a una operación militar llevada a cabo por el ejército de Israel. La portavoz de la UNRWA, Juliette Touma, informó que «grandes partes del campo quedaron completamente destruidas» tras una serie de detonaciones, y se estima que alrededor de 100 casas han sido destruidas o gravemente dañadas. Los desplazados se encuentran en zonas circundantes y en otros campamentos cercanos, después de haber soportado condiciones extremadamente difíciles.
Mientras tanto, la UNRWA sigue trabajando en los territorios ocupados, donde sus escuelas y clínicas mantienen un 85% de asistencia de alumnos y atienden a cerca de 400 pacientes diariamente. Sin embargo, la situación en Gaza es preocupante, ya que desde el pasado jueves está detenida la entrada de camiones con ayuda humanitaria, habiendo alcanzado el límite semanal establecido de 4.200 camiones.
En Afganistán, la reciente pausa en la financiación de la ayuda humanitaria por parte de Estados Unidos podría tener consecuencias devastadoras. Pio Smith, del Fondo de Población de la ONU (UNFPA), advirtió que esto podría resultar en la muerte de mil mujeres embarazadas adicionales entre 2025 y 2028. La interrupción de la asistencia afectará a más de nueve millones de personas que dependen de servicios de salud esenciales, dejando especialmente vulnerables a las mujeres en trabajo de parto.
Por otro lado, en la República Democrática del Congo, el coordinador de la ONU pidió de manera urgente la reapertura del aeropuerto de Goma, controlado por el grupo armado M23. Bruno Lemarquis destacó que sin este aeropuerto, se complican la evacuación de heridos y la entrega de suministros médicos, lo que pone en riesgo aún más vidas en una situación cada vez más crítica, en la que los combates han causado ya al menos 900 muertes.
Finalmente, en el contexto del Día Mundial contra el Cáncer, la Organización Panamericana de la Salud subrayó que esta enfermedad continúa siendo una de las principales causas de muerte en las Américas. Con más de 1,4 millones de vidas perdidas anualmente, la organización enfatizó la urgente necesidad de mejorar el acceso a tratamientos, especialmente para el cáncer infantil, donde las disparidades entre países de ingresos altos y bajos son alarmantes.
Fuente: ONU últimas noticias