La temporada de compras navideñas y de rebajas es un período de gran actividad en el comercio online en España, pero también viene acompañada de un aumento en los intentos de fraude digital. Según datos del Ministerio del Interior, en 2024 se registraron un total de 464.801 ciberdelitos, siendo el 88,8 % de ellos fraudes informáticos. A medida que más usuarios recurren al comercio digital, también se incrementa la suplantación de identidad y las estafas que buscan vulnerar la seguridad de las transacciones y la información personal.
La popularidad de los métodos de pago aplazado, como el BNPL (Buy Now, Pay Later), añade otra capa de complejidad. Según Oney, un 37,1 % de los españoles, en especial los jóvenes, utiliza este tipo de financiación. Esto obliga a los consumidores a extremar las precauciones al comprar en un entorno digital cada vez más dinámico y exigente, como lo ha señalado la campaña de concienciación ‘En lo digital, preocúpate igual’ de ASNEF.
Con el creciente riesgo de fraudes, Oney ha elaborado una serie de recomendaciones para proteger a los consumidores durante sus compras en línea. La primera de ellas es verificar la autenticidad del comercio. Antes de introducir datos personales o bancarios, es crucial comprobar que la web es oficial, revisando la URL y asegurándose de que el sitio utilice HTTPS y muestre el candado de seguridad en la barra del navegador.
Es también esencial validar la veracidad de cualquier comunicación procedente de entidades financieras. Dada la proliferación de campañas de phishing, Oney recomienda contrastar cualquier mensaje recibido a través de los canales oficiales de la entidad, dado que los bancos nunca solicitan datos personales de acceso a través de emails o mensajes. Si surge alguna duda, lo mejor es contactar directamente con el servicio de atención al cliente.
Además, se aconseja revisar periódicamente los movimientos bancarios. Activar las notificaciones en tiempo real del banco permite a los usuarios detectar rápidamente cualquier actividad sospechosa y actuar de inmediato. Establecer límites de gasto, tanto diarios como mensuales, y configurar restricciones para pagar en comercios extranjeros son prácticas que ofrecen una capa adicional de seguridad.
La utilización de redes y dispositivos seguros es igualmente crítica; es recomendable realizar compras desde conexiones privadas y cifradas, evitando el uso de Wi-Fi público que puede ser fácilmente interceptado.
Xochitl González, CMO de Oney, subraya la importancia de un esfuerzo colectivo en este ámbito: «La seguridad no depende únicamente de las herramientas tecnológicas, es un esfuerzo conjunto entre consumidores, comercios y entidades financieras». Para lograr un entorno de compra verdaderamente seguro, es necesario fomentar la colaboración y la prevención.
Oney, a través de su solución Oneytrust, está comprometida en impulsar unas compras online más seguras, combinando tecnología avanzada con herramientas de prevención para detectar transacciones anómalas y optimizar la experiencia del cliente durante el proceso de pago.
