Cada 12 minutos, un civil pierde la vida en conflictos armados, de acuerdo con los alarmantes datos divulgados recientemente por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU (OCHA). Este informe revela un aumento del 40% en las muertes de civiles en conflictos a nivel mundial durante el año 2024, un fenómeno que ha suscitado preocupación entre los defensores de los derechos humanos.
En total, al menos 48.384 personas fueron asesinadas el pasado año, entre ellas 502 defensores de derechos humanos. La OCHA destaca que una de cada cinco personas en el planeta ha declarado haber sufrido discriminación, lo que pone de manifiesto la persistencia de la violencia estructural y la falta de protección para los más vulnerables. «Estas cifras representan innumerables historias individuales y vidas combinadas», afirmó el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, subrayando la urgente necesidad de medidas efectivas para proteger a quienes se encuentran en situaciones de riesgo.
La violencia en los conflictos ha tenido un impacto devastador sobre los niños y las mujeres. Entre 2023 y 2024, se registraron aproximadamente cuatro veces más muertes de estas poblaciones en comparación con los dos años anteriores. La OCHA reporta que 16.690 niños y 21.480 mujeres fueron asesinados, siendo el 80% de las muertes infantiles y el 70% de las femeninas ocurridas en Gaza.
Además, el análisis revela que la discriminación se distribuye de manera desproporcionada entre grupos ya marginados. Casi un 28% de las personas con discapacidad declaró haber sufrido algún tipo de discriminación, en comparación con el 17% de aquellas sin discapacidad. Las mujeres enfrentan discriminación de género en el doble de proporción que los hombres, y los jóvenes de entre 15 y 29 años reportan más frecuentemente discriminación por motivos de migración, etnia, religión y orientación sexual.
Los ataques contra periodistas y defensores de derechos humanos siguen siendo preocupantemente altos. En 2024, al menos un defensor, periodista o sindicalista fue asesinado o desapareció cada 14 horas. El número de periodistas asesinados aumentó un 10%, alcanzando los 82 casos, de los cuales más del 60% se produjeron en zonas de conflicto, una cifra que no se había visto en más de una década.
A pesar de este sombrío panorama, el fortalecimiento de las instituciones supone una luz de esperanza. Más de la mitad de la población mundial cuenta actualmente con Instituciones Nacionales de Derechos Humanos independientes, y el número de países con estas organizaciones se ha triplicado en las últimas tres décadas, lo que ofrece un camino hacia la rendición de cuentas y la mejora en la protección de los derechos humanos.
Fuente: ONU últimas noticias
