En la pintoresca isla de Väddö, situada al norte de Estocolmo, se erige una casa que combina a la perfección la esencia de la arquitectura nórdica con un estilo de decoración floral único. Este encantador hogar, diseñado por el arquitecto local Lars Lundgren, ha llamado la atención no solo por su innovador diseño, sino también por la forma en que integra la naturaleza en cada rincón.
La estructura de la casa se caracteriza por líneas limpias y una paleta de colores suaves que reflejan la belleza natural del entorno. Grandes ventanales permiten la entrada de luz natural, ofreciendo vistas panorámicas de los bosques y la costa que rodean la propiedad. El uso de materiales sostenibles, como la madera local y el vidrio reciclado, resalta el compromiso del diseño con la ecología y la sostenibilidad.
El interior de la vivienda es un homenaje a la flora nórdica, con una decoración floral que aporta vida y color a los espacios. Las paredes están adornadas con arte botánico de artistas locales, mientras que los muebles de diseño escandinavo se combinan con cojines y cortinas que presentan estampados de flores silvestres. «La idea era crear un ambiente que hiciera eco de lo que se encuentra afuera», explica Lundgren. «Queríamos que cada habitación tuviera una relación íntima con la naturaleza».
En el jardín, un arroyo serpenteante rodea camas de flores silvestres que florecen en una variedad de colores a lo largo de las estaciones. Pequeños senderos de piedra llevan a áreas de descanso, donde los residentes y visitantes pueden disfrutar de la serenidad del paisaje. Elementos arquitectónicos como pérgolas y terrazas crean espacios exteriores perfectos para disfrutar del aire libre, en consonancia con la filosofía de vida que promueve el bienestar conectado con la naturaleza.
La combinación de la arquitectura nórdica con la decoración floral ha atraído la atención de medios y diseñadores de interiores tanto a nivel nacional como internacional. El proyecto ha sido nominado a varios premios de arquitectura y diseño, destacándose como un ejemplo de cómo la modernidad puede coexistir con la tradición y la naturaleza.
Además de ser un hogar, esta casa en Väddö se ha convertido en un destino para los amantes de la arquitectura y el diseño, quienes llegan atraídos por su estética única y su enfoque en la sostenibilidad. En un mundo donde el asociar el hogar con la naturaleza se vuelve cada vez más importante, este refugio nórdico destaca como un modelo a seguir, inspirando a muchos a repensar la forma en que habitamos nuestro entorno.
