El próximo 1 de junio dará comienzo uno e los eventos más importantes para el arte contemporáneo mundial: la Bienal de Venecia, que en su 55ª edición promete más espectacularidad que nunca.
Este año la bienal se realizará en el denominado Arsenal de Venecia, una zona ocupada por los antiguos astilleros de la ciudad, que ocupan más de 46.000 metros cuadrados, y a los cuales se ha sumado el espacio de los dos antiguos Salones de Armas.
En este inmenso espacio se levantará la laberíntica exposición entre el 1 de junio y el 24 de noviembre, que albergará 88 pabellones nacionales, y otras 49 muestras genéricas, entre las que se destacan increíbles instalaciones, como es el caso del artista Danh Vo, quien ha reconstruido en pleno espacio expositivo una iglesia católica con más de 200 años de antigüedad, que fue trasladada pieza por pieza desde Vietnam hasta Venecia para tal fin.
En total, se estima que serán unas 4500 obras las que se podrán admirar en la 55ª. Bienal de Venecia, destacándose la presencia por primera vez de países como Angola, Paraguay, El Vaticano y Kosovo.
Y como todos los años, también esta edición se ha organizado en base a un concepto, siendo la premisa de este caso aquello que impulsa el genio creativo de los artistas, según lo expresara Paolo Varatta, presidente de la Bienal de Venecia.
Así mismo, también es costumbre otorgarle un nombre al espacio expositivo, siendo este año Maximiliano Gioni, comisario de la Bienal, el responsable de otorgarle la denominación de Il Palazzo Enciclopédico, haciendo referencia a la cultura internacional que se da cita en esta bienal de arte contemporáneo.
De esta forma, Venecia prepara una Bienal que promete dejar huellas, destacándose también por la destacada presencia del arte latinoamericano, con una destacada intervención argentina en base al tema de Eva Perón, y de un pintoresco pabellón cubano.