En pleno Nolita (North Little Italy, barrio de Manhattan como Chinatown o el SoHo) se alza la enorme estructura del 11 de Spring Street. Este antiguo establo del siglo 19 es uno de los estandartes del street art en Nueva York.
Hace varios meses, fue comprado con la finalidad de derribarlo para construir bloques de pisos. Mientras la demolición no se llevaba a cabo, Caroline Cummings, la actual dueña, comprobó que el arte que ocupaba la fachada del edificio estaba «creciendo y evolucionando«. Sorprendida, comenzó a investigar un poco la historia del edificio hasta llegar a la web del colectivo Wooster, que contiene material recopilado durante años de las obras que ocupan los muros. Así nacio la idea de dar un último homenaje al edificio.
Desde hace dos meses, 45 artistas de todo el mundo (La mayoría listados aquí) han estado dandole la última capa de pintura, proceso que finalizó el pasado fin de semana con una concurrida apertura de puertas. En este pool de Flickr podeis ver como quedo tanto la fachada como el interior.
También podeis echar un vistazo a este video, que hace un repaso a todo el trabajo que se ha estado realizando:
