En muchas ocasiones hemos visto películas en las que los coches no pueden frenar, ya sea por un fallo en los frenos o porque el acelerador está atascado. Si el fallo es de los frenos lo más lógico es dejar que el coche desacelere por sí solo, pero si el problema es que el acelerador está atascado o que el control de crucero no se puede desactivar, la situación es más grave. Esto último es lo que le pasó a un conductor en Estados Unidos: el control de crucero de su Ford Excursion no se podía desactivar.
El hombre, aterrorizado, llamó a Emergencias (en EEUU es el 911) para avisar de que iba por la autopista y que su coche no podía parar. Se estaba acercando a Huntsville, Texas, una zona con una gran circulación de vehículos. Un oficial de policía oyó la alerta y supo lo que se tenía que hacer, pues él había presenciado una persecución reciente. El policía adelantó el SUV fuera de control, se puso delante del coche y finalmente consiguió frenarlo, quedando a muy poca distancia de un pick-up que estaba parado en un semáforo de un cruce entre dos carreteras con mucho tráfico. Todo esto fue grabado por cámaras, que están en todos los coches de policía de EEUU.
El conductor del SUV, como puede ser lógico, sólo pensaba en su familia y en no hacer daño a nadie mientras su coche seguía a 60 millas por hora (100 km/h) directo hacia el centro de la ciudad, hasta que el policía frenó a pocos centímetros del desastre como si de una película se tratara. Gatlin Jeter, el dueño del Ford Excursion, está convencido de que el policía, Rocky Carrel, le salvó la vida. En cuanto el coche se paró, Jeter se bajó y fue a abrazar el policía.
En cuanto al fallo del control de crucero, Ford ha publicado un comunicado en el que afirma que no pueden opinar al respecto porque no tienen detalles del suceso, y que no tienen constancia de un problema de seguridad con el sistema.
Podéis ver el vídeo entero con las grabaciones y las declaraciones de Jeter en Click2Houston (en inglés).
