No sabemos si es el ataúd más caro del mundo, o no. Ya se sabe cómo son estas cosas. De un día para otro aparece un nuevo objeto que supera en precio al anterior. La escalada de precios en muchos ámbitos no parece conocer límites. Mientras buena parte de la población mundial se devana los sesos para buscar un trabajo o una fuente de ingresos con la que afrontar la vida, las empresas fabrican productos de lujo a precios exorbitantes. Pero, si se fabrican es porque alguien los puede comprar. Esto es así.
Pues bien, hoy os presentamos un objeto de lujo muy especial. Se trata de un ataúd. ¿Pero quién quiere gastar mucho dinero en un objeto del que no podrá disfrutar? Bueno, no lo podrá disfrutar en vida, al menos que se trate de un vampiro. Aunque los vampiros están muertos, ¿o era no-muertos? En fin, este ataúd fue vendido en su día por más de 300.000 dólares. “¿Por qué? ¿Por qué está hecho de oro?”, os podréis preguntar. Pues sí, está hecho de oro.
Como si de un faraón egipcio se tratase, con este féretro podrás hacer tu último viaje con el mayor de los lujos, metido en un ataúd de oro macizo. Las creencias de muchas de las antiguas civilizaciones se basaban en una vida posterior a la muerte. Para ello, los fallecidos iban equipados con toda clase de ofrendas y viandas para disfrutar en esa vida en el más allá y honrar a los dioses con los que, presuntamente se iban a encontrar.
Pero, ¿y si una vez muertos olvidasteis comentarle algo importante a un ser querido? ¿Y si no os acordasteis de cerrar el gas de vuestra casa? Bueno, a lo mejor esa fue la causa de vuestro fallecimiento… El caso es que este ataúd viene con teléfono móvil incorporado. Para estar en contacto con los vivos… y con otros muertos que tengan cobertura.