Seguimos con nuestra sección de tácticas con algunas de las miniaturas del fantásctico mundo de Warhammer. Hoy nos toca hablar de los carros de guerra. Estas unidades están presentes en una buena parte de los ejércitos de Warhammer y todavía muchas veces no sabemos sacarles todo el partido que se les puede sacar.
También tienen múltiples puntos débiles como su resistencia en la mayoría de los casos y esto a su vez nos obligará a tener mucho cuidado con ellos ya que es bastante probable que en múltiples ocasiones no logren llegar hasta sus objetivos. Vamos a ver algunas de las principales utilidades de los carros y que no deberías hacer nunca con un carro en Warhammer.
Antes en la anterior edición la carga era un factor fundamental y decisivo a la hora de determinar que unidad sería la ganadora de un combate u otro, sin embargo en la edición actual tenemos que el que carga ya no tiene por que golpear primero… Tenemos que tener esto siempre muy presente cuando jugemos con unidades con cargas potencialmente ofensivas.
Ataca a pequeñas unidades de infantería
Es una de las mejores utilidades a la par que una de las más sencillas que le puedes dar a un carro. Están para eso, son perfectos para desrtruir pequeñas unidades enemigas como la milicia imperial o algunas unidades de lanceros elfos siempre y cuando no sean demasiados. Es más, en ocasiones puedes permitirte arriesgar con tu carro si no estas seguro de si ganarás el combate o no lánzalo al combate, ya que no suelen ser demasiado caros en puntos.
Lánzate contra caballerías que no sean pesadas
La carga de un carro contra una unidad de por ejemplo jinetes de jabalí puede ser devastadora, la mayoría de los carros pueden alcanzar fuerza 5 a la carga y de este modo neutralizar a las caballerías que no sean demasiado pesadas. Si las consigues hacer huir, esa caballería enemiga ya no podrá cargar contra otra unidad tuya en por lo menos un par de turnos.