El año pasado los accidentes de tráfico se redujeron notablemente a causa de los periodos de restricción de la movilidad ocasionados por la pandemia, pero aún así los accidentes en carretera están en un numero elevado. En total, 870 personas murieron en 2020, habiendo consumido alcohol o drogas el 48,7% de ellas. Por eso, la Unión Europea puso en marcha una nueva normativa que entrará en funcionamiento en julio de 2022, y que obligará a los nuevos vehículos a disponer de un conjunto de Sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS), entre los que se encuentran los denominados Interlocks. En este sentido, uno de los referentes en la fabricación de estos dispositivos, Dräger, explicó como afectarán los Interlocks a los conductores que planean comprar un vehículo nuevo.
¿Qué es un Interlock y cómo me afectará?
Conocidos también como dispositivos de bloqueo de arranque, estos sistemas de ayuda a la conducción segura obligan al conductor a espierar aire en un etilómetro para medir los niveles de alcohol en el aliento. El objetivo es impedir la circulación de los conductores que superen la tasa de alcoholemia permitida. Los Interlocks están conectados directamente al sistema de arranque del vehículo. De esta manera, en caso de que la concentración de alcohol exceda el límite legal, el aparato bloquea temporalmente, y de forma inmediata, la posibilidad de encendido del vehículo, garantizando así una incorporación al tráfico más segura.
La instalación de estos dispositivos en los nuevos vehículos será opcional. Sin embargo, el Reglamento establece que a partir de julio de 2022, los nuevos modelos de las marcas tendrán que contar con una interfaz estandarizada diseñada en exclusiva para instalar los Interlocks, permitiendo que la instalación sea sencilla.
Estos son los vehículos que serán susceptibles a esta regulación
Bajo esta nueva directriz, aquellos vehículos de nueva homologación de julio de 2022 en adelante, y desde julio de 2026 en vehículos nuevos, estarán afectados por este cambio en la legislación, y se incluyen marcas de gama baja y media.
Ayudas al volante como el control de la presión de neumáticos; el asistente inteligente de velocidad; el sistema de mantenimiento de carril; el frenado autónomo con detección de vehículos en movimiento y objetos o sistemas de control de somnolencia y distracciones, entre otros, entrarán a formar parte del día a día de muchos conductores que verán mejorada la calidad de su conducción notablemente.
“La introducción de estos sistemas en todos los vehículos ayudará a reducirla siniestralidad vial, de acuerdo con el objetivo de la Unión Europea”, según explica Dionisio Martínez de Velasco, Managing Director de Dräger en Iberia. “Por su parte, está demostrado que los Interlocks de Dräger ayudan a reducir notablemente la posibilidad de accidentes en carretera a consecuencia del alcohol. Esto brinda al conductor y al usuario que circula por cualquier vía una mayor confianza durante los trayectos, especialmente en carretera, donde las cifras de siniestralidad continúan siendo aún muy elevadas”.