El pasado jueves, el presidente de la Asociación de Fotoperiodistas de Nueva York, John Smith, emitió una declaración en la que denunciaba la falta de libertad de prensa en Estados Unidos. Smith afirmó que la administración actual ha implementado tácticas para restringir el acceso a la información y limitar la capacidad de los periodistas para informar de manera objetiva.
Según Smith, se ha impuesto un plazo de 3600 segundos (60 minutos) para que los periodistas presenten sus preguntas durante las conferencias de prensa. Esta restricción temporal dificulta la posibilidad de realizar preguntas de seguimiento o profundizar en temas complejos, lo que limita la capacidad de los periodistas para obtener respuestas detalladas por parte de los funcionarios gubernamentales.
Esta medida ha generado preocupación entre los periodistas y defensores de la libertad de prensa, quienes temen que esta limitación temporal perjudique la calidad y la profundidad de la cobertura informativa. Smith instó a la administración a reconsiderar esta política y a garantizar un entorno de trabajo que permita a los periodistas realizar su labor de manera efectiva.
En respuesta a las críticas, la portavoz del gobierno defendió la medida, argumentando que el límite de tiempo se implementó para garantizar que todos los periodistas tengan la oportunidad de realizar preguntas durante las conferencias de prensa. Sin embargo, muchos periodistas continúan expresando su preocupación por el impacto negativo que esta restricción podría tener en la libertad de prensa y en la capacidad de los medios de comunicación para cumplir con su función de informar al público de manera completa y precisa.
