El Senado de Estados Unidos aprobó recientemente la Ley TAKE IT DOWN (S. 146) mediante una votación a viva voz, cuyo objetivo es acelerar la eliminación de imágenes íntimas no consensuadas, incluyendo vídeos que imitan a personas reales, conocidos como «deepfakes». Sin embargo, a pesar de que proteger a las víctimas de estas invasiones de privacidad es un objetivo legítimo, la falta de un enfoque adecuado puede generar problemas mayores.
El proyecto de ley, tal como está redactado, establece un sistema de “aviso y eliminación” que pone en riesgo la libertad de expresión, la privacidad de los usuarios y el debido proceso, sin abordar realmente la problemática que pretende solucionar. Activistas y expertos han advertido que esta legislación podría censurar contenido legal, lo que perjudicaría no solo a individuos, sino también a medios de comunicación y organizaciones que se basan en la sátira o en la crítica política.
Antes de la votación del Senado, varias organizaciones, incluyendo la Electronic Frontier Foundation (EFF) y el Centro para la Democracia y la Tecnología (CDT), enviaron una carta solicitando cambios en la ley para proteger el contenido legítimo que no se considera NCII. En la misiva se señala que la disposición de «toma de contenido» se aplica a un rango mucho más amplio de imágenes y que no se contempla ninguna protección contra solicitudes de eliminación frívolas o de mala fe.
El texto de la ley estipula que las aplicaciones y sitios web deben retirar el contenido en un plazo de 48 horas, lo que podría llevar a las pequeñas plataformas a cumplir sin la posibilidad de verificar las reclamaciones, lo que aumentaría la probabilidad de censura errónea. Además, los proveedores de servicios de mensajería encriptada podrían verse en la imposibilidad de cumplir con las notificaciones de eliminación, ya que no pueden acceder a los mensajes en sus plataformas.
Críticos sugieren que el Congreso debería enfocarse en hacer cumplir y mejorar las leyes civiles y penales existentes que abordan las imágenes íntimas no consensuadas, en lugar de optar por un régimen de eliminación amplio que podría ser fácilmente abusado. Se hace un llamado a los ciudadanos para que tomen acción y presionen a sus representantes en la Cámara de Representantes para que se opongan a esta legislación.
Fuente: EFF.org