Un innovador estudio realizado por la Universidad de Michigan ha puesto de manifiesto el potencial de los retinoides en el tratamiento del envejecimiento cutáneo, particularmente en pieles muy deterioradas por la edad. En esta investigación, 36 personas mayores de 80 años participaron en un experimento en el que una mitad de su cuerpo recibió loción con retinol al 0,4 % y la otra, una crema sin el principio activo. Los resultados, publicados en la revista JAMA Dermatology, revelaron que en solo cuatro semanas, la piel tratada con retinol mostró una disminución significativa de arrugas finas y una mejora notable en su grosor y firmeza.
Mireia Fernández, directora dermocosmética de Perricone MD, destacó la precisión del estudio, indicando que su diseño permite observar de manera clara lo que el retinol puede lograr incluso en condiciones adversas, como las de una piel envejecida. El estudio demostró que el uso del retinol aplicado tres veces por semana aumentó la producción de procolágeno tipo I y glicosaminoglicanos, esenciales para la hidratación y estructura de la piel.
Raquel González, cosmetóloga y fundadora de Byoode, subrayó que estos resultados confirman el efecto del retinol no solo en la superficie, sino también en las capas más profundas de la piel, mejorando la matriz dérmica. Este efecto es visible desde la cuarta semana de tratamiento, lo cual puede motivar a las personas que consideren iniciar un tratamiento con retinol.
Además, aunque el estudio se centró en el cuerpo, sus hallazgos pueden extrapolarse al rostro, donde la exposición a factores externos acentúa los signos del envejecimiento. Fernández comentó que el retinol actúa como un «entrenador celular», renovando la piel desde dentro y promoviendo la producción de colágeno.
Sin embargo, los efectos del retinol son temporales; los beneficios empiezan a desvanecerse una vez que se interrumpe su uso. Esto resalta la importancia de la continuidad en la rutina de cuidado de la piel. La directora dermocosmética de Medik8, Estefanía Nieto, advirtió sobre la necesidad de integrar el retinol a largo plazo para mantener sus resultados.
Además de los tratamientos tópicos, la vitamina A y otros retinoides pueden ser beneficiosos también por vía oral. Marta Agustí, directora nutricional de Advanced Nutrition Programme, explicó que la sinergia entre el uso interno y tópico de la vitamina A puede maximizar la calidad de la piel.
Cada uno de estos productos está diseñado para combatir el envejecimiento de la piel de manera eficaz y sin irritación, demostrando que la investigación y la innovación en la dermocosmética están abonando el terreno para unos cuidados más efectivos y personalizados.