Durante el primer trimestre de 2025, los huéspedes disfrutaron de un total de 129,6 millones de noches en alojamientos de corto plazo en la Unión Europea, adjudicados a plataformas como Airbnb, Booking y Expedia. Estas cifras reflejan un repunte significativo en el sector del turismo, ya que el número total de noches de huéspedes registró un incremento del 4,8% en comparación con el año anterior, 2024, y un asombroso crecimiento del 34,5% respecto a 2023.
Este auge en la ocupación de alojamientos temporales es indicativo de una recuperación sostenida en el sector turístico, que ha ido volviendo a los niveles prepandémicos. El aumento en el uso de plataformas digitales para reservas también señala un cambio en las preferencias de los consumidores, quienes cada vez optan más por experiencias personalizadas y alojamientos únicos en lugar de las ofertas hoteleras tradicionales.
El crecimiento es aún más notable al considerar las fluctuaciones que el sector enfrentó durante la pandemia de COVID-19. Muchas regiones de la UE han visto un retorno de turistas, tanto locales como internacionales, que buscan alternativas flexibles y asequibles para sus estancias. Este fenómeno se traduce no solo en una recuperación económica para los anfitriones y las plataformas, sino que también refuerza la importancia del turismo en la economía de muchos países europeos.
Las ciudades más grandes y populares del continente, como París, Barcelona y Roma, continúan siendo los destinos preferidos, aunque también se observa un creciente interés por áreas menos concurridas, donde los viajeros buscan escapar de las multitudes. Este cambio en el comportamiento puede estar impulsado por la búsqueda de experiencias más auténticas y la opción de disfrutar de entornos más tranquilos.
Además, la regulación y la gestión de alquileres a corto plazo siguen siendo temas de debate en varias ciudades europeas, donde las autoridades locales trabajan para encontrar un equilibrio entre fomentar el turismo y proteger a las comunidades residentes. A medida que el sector sigue evolucionando, será crucial que se implementen políticas efectivas que garanticen la sostenibilidad y la convivencia armoniosa entre turistas y residentes.
Los datos del primer trimestre de 2025 son, en definitiva, una señal alentadora para el futuro del turismo en la UE. Con el crecimiento sostenido en el número de noches, el sector de los alojamientos de corto plazo se posiciona como un componente vital en la recuperación económica y la revitalización social de muchas comunidades.