En un fenómeno inesperado que ha capturado la atención de millones de usuarios en las redes sociales, una planta ha emergido como la nueva sensación viral. Todo comenzó cuando un usuario de TikTok compartió un video mostrando cómo hacer crecer una planta a partir de un simple y común snack: las papas fritas. Lo que inicialmente parecía un truco improbable se ha convertido en un desafío global que ha intrigado a jardineros novatos y expertos por igual.
El video original muestra a una joven que, después de triturar una bolsa de papas fritas y remojarlas en agua, planta el brebaje resultante en una maceta con tierra. En un sorprendente giro de los acontecimientos, días más tarde, se observa el crecimiento de un pequeño brote verde, seguido de un vigoroso tallo. La publicación rápidamente se viralizó, acumulando millones de vistas y miles de comentarios, mientras usuarios de distintas partes del mundo compartían sus propios intentos con resultados mixtos.
Científicos y expertos en botánica han intervenido para explicar el fenómeno, aclarando que es poco probable que las papas fritas en sí sean responsables del crecimiento de una planta. La teoría predominante sugiere que la maceta originalmente contenía semillas o esporas que, al ser regadas, germinaron de forma natural. Sin embargo, esto no ha detenido a miles de entusiastas de la jardinería en las redes, quienes continúan experimentando y compartiendo sus progresos.
Este fenómeno también ha generado una conversación más amplia sobre los «hacks» virales y la forma en que la información se disemina en las redes sociales. Aparte de inspirar creatividad en los usuarios, también resalta la necesidad de un escepticismo saludable cuando se trata de métodos no convencionales.
Simultáneamente, grandes marcas de snacks están aprovechando la oportunidad para promocionarse a través de este nuevo interés botánico. Algunas han lanzado campañas publicitarias humorísticas explotando la idea de que sus papas fritas no solo son deliciosas, sino también potencialmente «mágicas».
El fenómeno de la planta nacida de una papa frita, aunque basado en un malentendido, ha unido a comunidades en todo el mundo en torno al simple placer de experimentar con la naturaleza, demostrando una vez más el poder transformador de las redes sociales para convertir lo ordinario en algo extraordinario.