Los expertos en salud y nutrición han debatido durante mucho tiempo acerca de la cantidad de azúcar que deberíamos consumir diariamente. Aunque algunos defienden un consumo mínimo, otros argumentan que no existe un límite establecido. No obstante, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otras organizaciones de salud han proporcionado pautas en cuanto a la ingesta máxima de azúcar.
La OMS recomienda que el consumo de azúcar libre, es decir, el azúcar añadido a los alimentos y bebidas, no supere el 10% de la ingesta calórica diaria. Además, sugiere que una reducción adicional al 5% podría tener beneficios adicionales para la salud.
Esto se traduce en alrededor de 25 gramos (unas 6 cucharaditas) de azúcar añadido al día para una persona adulta con una ingesta calórica promedio de 2,000 calorías al día. Sin embargo, la OMS también especifica que una reducción aún mayor al 5% (unos 12 gramos o 3 cucharaditas) sería aún más beneficiosa para la salud.
El consumo excesivo de azúcar ha sido relacionado con un mayor riesgo de obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer. Además, el azúcar añadido puede contribuir al aumento de peso y a la falta de nutrientes esenciales en la dieta.
A pesar de las recomendaciones, muchos países superan ampliamente estas cifras en su consumo diario de azúcar. Esto se debe principalmente al consumo de alimentos procesados y bebidas azucaradas, que a menudo contienen altas cantidades de azúcar añadido y tienen un impacto negativo en la salud.
Es importante señalar que las recomendaciones de la OMS no incluyen el azúcar naturalmente presente en las frutas y verduras, ya que estos alimentos también contienen nutrientes esenciales para una dieta saludable. Sin embargo, es recomendable priorizar el consumo de frutas enteras en lugar de jugos o smoothies, ya que estos últimos suelen tener un contenido de azúcar más concentrado.
En conclusión, la OMS y otras organizaciones de salud sugieren limitar la ingesta de azúcar añadido a menos del 10% de la ingesta calórica diaria, con una reducción adicional al 5% siendo aún más beneficiosa. Es importante tomar conciencia de la cantidad de azúcar que consumimos diariamente y hacer cambios en nuestra dieta para reducir el consumo de alimentos y bebidas altamente procesados. Esto sin duda contribuirá a una mejor salud y a prevenir enfermedades asociadas con el consumo excesivo de azúcar.
