En una emotiva ceremonia celebrada en Madrid, la Fundación Arquia otorgó oficialmente las becas Arquia a 49 jóvenes arquitectos y estudiantes de arquitectura, en un evento que destaca la importancia de apoyar el talento en el sector arquitectónico. Con un rango de edad entre 22 y 28 años, los beneficiarios tendrán la oportunidad de realizar prácticas en algunos de los estudios de arquitectura más prestigiosos del mundo, incluyendo España, Europa y Estados Unidos.
Con una inversión total de 500.000 euros para el año 2025, el programa arquia/becas se mantiene como la iniciativa más relevante del país para impulsar las carreras de los futuros arquitectos. Los becados podrán desarrollar sus competencias en más de 30 estudios de renombre internacional en 16 ciudades de siete países, trabajando junto a figuras destacadas del diseño arquitectónico como Foster + Partners, RCR, Álvaro Siza, Rafael Moneo y Carme Pinós. Entre estas firmas se encuentran varias galardonadas con el prestigioso Premio Pritzker, así como otras que han recibido reconocimientos en arquitectura contemporánea de la Unión Europea.
En la ceremonia también se aprovecharon las experiencias de antiguos becarios. El reconocido arquitecto Fran Silvestre, quien fue uno de los primeros beneficiarios de este programa en 2001, compartió su trayectoria y el impacto que tuvo su estancia en el estudio de Álvaro Siza en Lisboa. Además, se presentaron conferencias de jurados de la edición anterior, como Roger Tudó y Bet Capdeferro, quienes introdujeron nuevas temáticas que guiarán el próximo ciclo de becas.
La convocatoria de la XXVI edición tuvo una destacada respuesta, con 465 solicitudes provenientes de España y Portugal, lo que refleja el creciente interés y la importancia de estas becas en la formación de jóvenes talentos. Las modalidades de participación —por expediente académico y por concurso— permiten un acceso más inclusivo al programa.
La entrega de diplomas concluyó con una mesa institucional que contó con la presencia de Javier Navarro, presidente de la Fundación Arquia, junto con otros directivos, reafirmando así el compromiso de la fundación por fomentar el talento emergente y enriquecer el campo de la arquitectura a través de experiencias significativas en contextos de excelencia. Este continuo apoyo se traduce en una inversión en el futuro del sector, alentando a los jóvenes a explorar y crecer en sus trayectorias profesionales.
